En Grand Central Station me senté y lloré. Elizabeth Smart
Leída a la luz de la historia de Elizabeth Smart, esta breve novela es la intensidad misma. Contiene todo lo que a mi juicio debe tener un texto para ser una pequeña obra maestra.
Me repito: intensa. Y sensual. Y emocionante. Y abrumadora.
Elizabeth Smart. En Grand Central Station me senté y lloré. Periférica, 2009
Resumen de la editorial:
En Grand Central Station me senté y lloré, publicado por primera vez en 1945, y que muy pronto se convertiría en un verdadero libro de culto al ser traducida a numerosos idiomas, narra con un lenguaje prodigioso, lleno de imágenes tan originales como potentes, la pasión de su autora por un hombre casado del que se enamoraría incluso antes de conocerlo personalmente.
Absolutamente intensa y poética. Un libro genial, no gustará a algunos lectores, pero quienes sepan paladearlo se encontrarán con una joya inigualable.
ResponderEliminarUn abrazo
Tal cual, tampoco es para todos los momentos de una vida, pero como decís, una joya. Un abrazo.
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