Fractura. Andrés Neuman
Hace tiempo que el nombre de Andrés Neuman venía resonándome y debuto con su última novela. Que me sorprendió es lo primero que puedo decir. Y: que me fascinó y me tuvo atrapada varios días, que me resultó triste, graciosa, sabia, conmovedora, feminista, ecologista.
Neuman teje su novela a partir de una "catástrofe" atómica y las huellas que ésta dejó en un niño entonces y a lo largo de toda su vida. El punto de partida es otra "catástrofe": Fukushima. Sin golpes bajos, vamos recorriendo la vida de Watanabe por distintos países y la vida de cuatro mujeres (sabias, muy sabias ellas) entrando y saliendo de su vida. Nos adentramos entonces en los entresijos de los olvidos personales y los colectivos, la memoria personal y la colectiva, la figura de la víctima y la del testigo, las cicatrices, las fracturas.
Esta es una novela de esas que se quedan con una durante mucho tiempo. Y Neuman un tipo para seguir.
Recomiendo esta entrevista sobre Fractura, la escritura, el feminismo.
Andrés Neuman. Fractura. Alfaguara, 2018
Resumen de la editorial:
«Me mostró sus cicatrices. Un fino entramado en los antebrazos y la espalda. Parecía transportar un árbol. Luego él vio las mías. Nos sentimos livianos, un poco feos y muy bellos. Dos supervivientes.»
El señor Watanabe, superviviente de la bomba atómica, se siente un fugitivo de su propia memoria y está a punto de tomar una de las decisiones más cruciales de su vida. El terremoto previo al accidente de Fukushima provoca un movimiento de placas que remueve el pasado colectivo.
Cuatro mujeres narran sus vidas y sus recuerdos de Watanabe a un enigmático periodista argentino, en un recorrido sentimental y político por ciudades como Tokio, París, Nueva York, Buenos Aires o Madrid. Este cruce de idiomas, países y parejas va revelando cómo nada ocurre en un solo lugar, cómo cada acontecimiento se expande hasta hacer temblar las antípodas. El modo en que las sociedades recuerdan y, sobre todo, olvidan.
En Fractura se entretejen amor y humor, historia y energía, la belleza que emerge de las cosas rotas. Con esta novela Andrés Neuman regresa con fuerza a la narrativa de largo aliento, que lo consagró internacionalmente con El viajero del siglo, y firma su obra mayor.
0 comentarios: