La novia gitana. Carmen Mola


Impactante es poco. Esta novela tiene un ritmo alucinante, unos personajes construidos casi perfectamente y una trama adictiva.

Además se pasea con profundidad por temas como la discriminación, los femicidios, la soledad y con sutileza y algo de humor por otros como las fake news.

Lo dicho. Novela trepidante y autora (¿la Elena Ferrante de la novela negra?) para seguir con atención, si es que nos vuelve a regalar otro libro.



Carmen Mola. La novia gitana. Alfaguara, 2018

Resumen de la editorial:
«En Madrid se mata poco», le decía al joven subinspector Ángel Zárate su mentor en la policía; «pero cuando se mata, no tiene nada que envidiarle a ninguna ciudad del mundo», podría añadir la inspectora Elena Blanco, jefa de la Brigada de Análisis de Casos, un departamento creado para resolver los crímenes más complicados y abyectos.
Susana Macaya, de padre gitano pero educada como paya, desaparece tras su fiesta de despedida de soltera. El cadáver es encontrado dos días después en la Quinta de Vista Alegre del madrileño barrio de Carabanchel. Podría tratarse de un asesinato más, si no fuera por el hecho de que la víctima ha sido torturada siguiendo un ritual insólito y atroz, y de que su hermana Lara sufrió idéntica suerte siete años atrás, también en vísperas de su boda. El asesino de Lara cumple condena desde entonces, por lo que solo caben dos posibilidades: o alguien ha imitado sus métodos para matar a la hermana pequeña, o hay un inocente encarcelado.
Por eso el comisario Rentero ha decidido apartar a Zárate del caso y encargárselo a la veterana Blanco, una mujer peculiar y solitaria, amante de la grappa, el karaoke, los coches de coleccionista y las relaciones sexuales en todoterrenos. Una policía vulnerable, que se mantiene en el cuerpo para no olvidar que en su vida existe un caso pendiente, que no ha podido cerrar.
Investigar a una persona implica conocerla, descubrir sus secretos y contradicciones, su historia. En el caso de Lara y Susana, Elena Blanco debe asomarse a la vida de unos gitanos que han renunciado a sus costumbres para integrarse en la sociedad y a la de otros que no se lo perdonan, y levantar cada velo para descubrir quién pudo vengarse con tanta saña de ambas novias gitanas.

Los divinos. Laura Restrepo


Con Los Divinos Laura Restrepo hace un ejercicio escalofriante: trata de entender al femicida de una niña de 7 años para concluir que "si el Muñeco es la cara visible del monstruo, la cara oculta somos nosotros". El Muñeco es el femicida de ficción para un femicidio real, el de Yuliana Samboní.

Con un lenguaje coloquial y bien colombiano, Restrepo se mete en el medio de un grupo de cinco amigos de clase acomodada y va mostrando sus pactos, sus violencias, sus impunidades.

Es una novela impactante, y repito una palabra: pacto. Detrás de este femicidio en particular, pero detrás de todas las violencias en general, hay pactos de clase y pactos machistas. Los Divinos retrata esta realidad de un modo que asusta.

















Resumen de la editorial: 
A partir un crimen verídico, Laura Restrepo ha construido esta ficción. Los personajes que en ella figuran no existen fuera del mundo imaginado. Pero la tragedia de la víctima es brutalmente real. Página tras página se va revelando el oscuro andamiaje que pudo haber detrás, hasta llegar al brillante y ostentoso mundo de los Tutti Frutti, cinco hombres jóvenes de la clase alta bogotana, vinculados entre sí desde la infancia por una hermandad juguetonamente perversa y levemente delictiva. A lo largo de sus vidas cotidianas se va prefigurando, inexorable como un sino, el camino que conduce a esta transgresión intolerable, esta suerte de anuncio de Armagedón que hará estallar la resignación y la conciencia de todo un país.
Los Divinos es un extraordinario ejercicio de comprensión y reinterpretación de los hechos. Un relato recóndito, vertiginoso y profundamente perturbador contra el feminicidio. En esta novela, la autora trasciende el crimen narrado para llegar, a través de él, hasta los recovecos más oscuros de toda una cultura.



Dos cortitas y al pie: Ferrari + Camilleri


Una de un joven, otra de un anciano. Kike Ferrari tiene 46, lo catalogan de "escritor proletario", ya que por las noches trabaja limpiando una estación de subte. Andrea Camilleri, 93 años, es un visitante asiduo de estos espacios.

En La pirámide de fango tenemos al queridísimo Montalbano resolviendo un caso con muchas aristas actuales: la corrupción en la obra pública, que parece que no tiene fronteras. Pero también, otros temas siempre tan humanos en este personaje, como las pérdidas, el envejecimiento e, infaltable, la gastronomía.

Que de lejos parecen moscas es una novela totalmente diferente: vertiginosa, explosiva. Me recordó en algunos aspectos a Oscura monótona sangre, libro de Sergio Olguín que leí hace añares. La protagoniza un hombre que hace negocios en Argentina: en dictadura y en democracia. Un ser horrible pero que se para en la vida varios escalones más arriba que todos los demás. Un impune. HASTA QUE...

Dos lecturas rápidas y entretenidas para descontracturar el fin de año.

Resumen de la editorial:
La pirámide de fango
Profundamente afectado por la muerte del joven François, y mientras intenta asimilar lo que esta pérdida significa para Livia y para él, Salvo Montalbano tiene que sobreponerse al cansancio y al desánimo antes de enfrentarse a un caso ligado a esa lacra que, por desgracia, tanto abunda en el mundo de hoy: la corrupción política en las adjudicaciones de obra pública. Como si el tiempo y el paisaje reflejaran ese estado de ánimo del comisario, una lluvia pertinaz y copiosa cae sobre Vigàta e inunda sus calles y sus campos. En un solar abandonado, que el agua ha transformado en un lodazal, el cadáver del joven contable Giugiù Nicotra aparece con un disparo en la espalda. La investigación del asesinato exige todo el ingenio de Montalbano y sus ayudantes, y a medida que el comisario va aclarando el enigma, surge otro tipo de fango, el de los favores, las contratas amañadas y las concesiones fraudulentas. Montalbano no está dispuesto a mirar hacia otro lado y, fiel a su carácter, no cejará hasta llegar al fondo de la cuestión; sin embargo, hay algo que no encaja: ¿por qué la víctima se arrastró para morir dentro de un tubo de canalización del agua?
Andrea Camilleri. La pirámide de fango. Salamandra, 2014
Que de lejos parecen moscas
El señor Machi es el perfecto reflejo del éxito y del desprecio. Dueño de un pequeño imperio en Argentina, hizo su fortuna bajo la dictadura militar y luego la afianzó bajo los dos primeros gobiernos de la democracia casándose con una mujer de doble apellido, hija de un terrateniente. Lo que no le impide rodearse de bellas mujeres que obedecen a todos sus caprichos. Tiene un BMW, una colección de trescientas corbatas y diez millones de dólares en el banco. La cocaína y la «pastilla azul» le permiten distraerse de las quejas de su esposa por sus infidelidades y de las debilidades de sus hijos, tan distintos a él, pero sobre todo lo ayudan a ignorar a sus muchos enemigos, a quienes él considera insectos «que de lejos parecen moscas». Hasta que un día, encuentra un cadáver en el maletero de su BMW, atado con las esposas rosas de peluche que usa con sus amantes. Y entonces empieza otra historia.
Kike Ferrari. Que de lejos parecen moscas. Alfaguara, 2018 (2011)




El Petiso Orejudo. María Moreno


Amo a María Moreno. Es una declaración de principios. Luego viene lo demás.

Vamos a este libro que no tiene una única categoría: es un ensayo, una investigación periodística, la crónica de una época, una novela, una biografía. Todo eso.

Moreno se mete con el Petiso Orejudo, el cuco de muchas infancias, el protagonista de mitos y de cuentos (acá, uno de Mariana Enriquez, acá, uno de Guillermo Saccomano). Se mete en los expedientes policiales, en los informes médicos y psiquiátricos y nos devuelve una mirada sobre una época y el sistema social. Una mirada sobre la inmigración y la miseria que construyó un discurso que, con variantes, se sigue escuchando hoy que la derechización de los relatos vuelven a ser hegemónicos.

Amo a María Moreno.









María Moreno. El Petiso Orejudo. Página/12, 2018 (1994)
Resumen de la editorial:
El prontuario boca a boca del Petiso Orejudo fue siempre tan impreciso como atrapante: un niño que nunca crece y goza estrangulando a oros niños tan pobres como él, que no se arrepiente y sigue matando –sin distinción entre convictos o gatos—en el penal de Ushuaia donde muere en 1944. Pero desde la aparición de este libro su historia no termina. Aproximadamente medio siglo después, María Moreno produjo la investigación que nadie había iniciado y, literalmente, “reabrió el caso”. Es decir, la documentó, lo intervino con documentación, imaginación e hipótesis impensadas. Separó las partes responsables en la construcción del monstruo y las puso a disposición de una lectura contemporánea. Esta es una bellísima historia triste, de pobreza, miedo y hambre donde los documentos son utilizados como umbrales más que como pruebas y sólo queda intacto el misterio de los móviles, tutelado por la sinrazón que la morbosa cronista se esfuerza en no perturbar. “Qué puedo hacer yo si no me puedo asujetar” define el Petiso, acaso como única libertad del “desatado”. Esta primera reedición de El Petiso Orejudo recupera un eslabón –en el sentido de joya y portador de adn—en la literatura de María Moreno. Liliana Viola


La novena hora. Alice McDermott


Qué novela más extrañamente bella. Habla de mujeres un tiempo que ya no existe, realizando acciones de un tiempo en que el Estado no asistía a los ciudadanos necesitados, y en su lugar estaban ellas. La novela, además de Annie y Sally, habla de monjas.

Mi experiencia infantil con las monjas no es bien recordada por mí: mucha severidad innecesaria es lo que guarda mi memoria. Pero las monjas de esta novela, ambientada en los inicios del siglo XX, actúan, dejando de lado la cuestión religiosa, con sororidad.

Me resultó sorprendentemente interesante la visión de estas monjas sobre las mujeres dentro del matrimonio. Sabias.

Y qué bien cómo la autora no necesita ser explícita, más que una vez y como dato anecdótico, con el tema de los curas y su poder sobre ellas. Está presente todo el tiempo, sobrevolando. No tiene necesidad de ser directa. Sabia también McDermott










Alice McDermott. La novena hora. Del Asteroide, 2018 (2017)
Resumen de la editorial
En una oscura tarde de invierno, en el Brooklyn de principios del siglo xx, un joven inmigrante irlandés que acaba de ser despedido convence a su mujer, que está a punto de dar a luz, para que salga a hacer la compra. Una vez solo en el apartamento, abre el gas y se suicida. La hermana St. Saviour, una monja de un convento cercano, será quien ayude a Annie, la pobre viuda, a rehacer su vida.
Annie trabajará durante muchos años como planchadora en la lavandería del convento. Su hija Sally, la verdadera protagonista de la historia, se criará entre pilas de ropa blanca y el siseo constante de la plancha pero, llegado el momento, deberá elegir su propio camino en la vida.
La novena hora es una preciosa novela, profundamente humana, sobre el perdón, la generosidad y el olvido. Con esta historia que recorre tres generaciones de un pequeño vecindario de Brooklyn, Alice McDermott vuelve a demostrar que es una de las más notables escritoras norteamericanas en activo.


El color púrpura. Alice Walker


¿Quién te has creído que eres? [...] Eres negra, eres pobre, eres fea, eres mujer. Vamos, que no eres nada.
Con esas características, Nettie y Celie tienen encima todos los males del mundo.

Me llamó la atención en esta novela epistolar, algo a lo que le vengo dando vueltas desde hace tiempo, y es la necesidad de la humanidad de parecerse a la minoría poderosa en lugar de aliarse con las mayorías más damnificadas. Entonces, la búsqueda de algunos personajes varones por ser tan hombres como los blancos a partir de someter a sus mujeres es tremenda, tremenda.

Las mujeres de El color púrpura, tan distintas, una sumisa, otra rebelde, otra más libre, y así, chocan con varones que comparten con ellas la desgracia del color de su piel y su pobreza, pero que así y todo tienen una ventaja que los hace poderosos en sus hogares: tienen pene. Y ellas se defienden de eso como pueden, a lo largo de sus vidas. O se resignan hasta que ya no quieren hacerlo.

Una novela preciosa, dura, y que parece increíble, pero que es bien real. Aún hoy.











Alice Walker. El color púrpura. Círculo de lectores, 1986 (1982)

Resumen de la editorial:
Esta es la historia de dos hermanas: Nettie, que ejerce como misionera en África, y Celie, que vive en el Sur de Estados Unidos, casada con un hombre al que odia y abrumada por la vergüenza de haber sido violada por quien cree que es su padre. A lo largo de treinta años ambas mantienen el recuerdo y la esperanza de reencontrarse y vuelcan sus sentimientos en unas cartas conmovedoras. Pero la dramática existencia de Celie cambiará cuando entre en su vida la amante de su marido, una extraordinaria mujer llama Shug Avery.
Alice Walker traza en esta ya clásica historia, narrada en formato epistolar, un crudo y sin embargo bello relato del abuso hacia las mujeres y la comunidad afroamericana en los Estados Unidos de la primera mitad del siglo XX. El relato de ambas hermanas, merecedor del Premio Pulitzer y del National Book Award en 1983, se convierte en símbolo de una lucha que aún a día de hoy no hemos acabado de librar.



Las grietas de Jara. Claudia Piñeiro


He aquí la última novela que me quedaba por leer de Claudia Piñeiro. Y está muy bien, tiene esos elementos que Claudia utiliza para mantenerme atrapada hablando de gente común que en algún momento hace algo inesperado y tiene que vivir con eso.

Vi la película después de terminar con el libro. Está bien, pero por eso el cine no es lo mío: no logra transmitir, no se acerca, a lo que es Simó, a lo que lo viene corroyendo, a esa vida amarga, cómoda tal vez, que se va agrietando. En eso, Claudia Piñeiro es implacable.

Simó es también un desclasado, padece uno de los males de la humanidad que más me obsesiona. Cuidamos a los peces grandes en lugar de defender a los nuestros, los chicos como nosotros.

Los cuentos de Quién no tienen también algo de eso: ¿quién no hizo alguna vez alguna cosa por fuera de la ley? ¿Quién no se preguntó alguna vez "por qué yo no"?








Claudia Piñeiro. Las grietas de Jara. Alfaguara, 2018 (2009)

Resumen de la editorial:
Aunque Pablo Simó quiere construir la torre de sus sueños, se limita a dibujarla: hace veinte años que trabaja en un estudio de arquitectura que no puede o no quiere dejar. Veinte años son también los que lleva con Laura, a quien sólo lo unen la costumbre y una hija típicamente adolescente.
Cuando una joven llegue inesperadamente al estudio buscando a Nelson Jara, comenzará a revelarse la trama del secreto en la que Simó está implicado junto con su jefe y una compañera de trabajo. La aparición de la muchacha y las derivaciones de este hecho del pasado abrirán una grieta en la precaria estabilidad del arquitecto que verá derrumbarse una a una las certezas que lo sostuvieron hasta el momento.